Pasé años sintiendo que me dejaba de lado, haciendo siempre lo que los demás querían, sin comprometerme conmigo misma, mis proyectos y sueños. Durante mucho tiempo, sufrí trastornos alimenticios, me sentí mal conmigo misma, odiaba mi cuerpo y mi forma de bailar. Cometí muchos errores al iniciar mi emprendimiento de danza, y tenía la creencia limitada de que solo los ingenieros ganaban bien.

Me dedicaba a enseñar baile, a soñar con muchas alumnas y formar muchas personas, pero finalmente, alguien me hizo ver que solo me había convertido en una profesora de danza, sin orden de ingresos, sin miras de crecimiento REALES, no en una líder, visionaria y propietaria de un negocio.

Ahí supe que debía hacer algo distinto, e invertí en mentores y entrenadores que pudieran guiarme y convertirme en el orgullo de mí misma y lo que realmente quería ser, pero además empoderarse de mi negocio y hacerlo crecer.

Ahora quiero ayudar a otros bailarines y profesores de danza a transformar su pasión en un negocio rentable, a liberarse de creencias limitantes y a tomar el control de su crecimiento profesional. Quiero que descubran que es posible vivir de la danza con estabilidad, propósito y libertad, sin sentirse estancados ni sacrificando su bienestar en el camino. Mi misión es guiarlos con estrategias, herramientas y el conocimiento que me permitió pasar de simplemente enseñar, a liderar y hacer crecer mi propia escuela de danza con éxito.